El Taller de Juguetes de Papá Noel abre un año más sus puertas en La Ermitilla de Quintanar

La Sala “La Ermitilla” acoge este año el Taller de Juguetes de Papá Noel, un lugar mágico para que visiten la familias del 3 al 30 de diciembre donde pueden verse algunos de los juguetes que se crean en este Taller, regalos, incluso el dormitorio de Papá Noel.

Un año más, desde la Concejalía de Festejos de Quintanar de la Orden han querido hacer un guiño a lo más pequeños y sus familias con una actividad de la que disfrutarán a lo grande y que les permitirá sentir la magia y el espíritu de la Navidad.

Así, en la tarde de este sábado, 3 de diciembre, abría sus puertas en La Ermitilla el Taller de Papá Noel, un lugar que se podrá visitar hasta el próximo 30 de diciembre en horario de martes a sábado de 17.30 a 20.30 horas y los viernes, sábados y domingos además en horario de 12 a 14 horas.

En el acto de inauguración han estado presentes el primer teniente de alcalde, José María Viller; la concejala de Festejos, Ana María Serrano; y el concejal de Cultura, José Ángel Escudero; además de Laura Fernández Serrano y María Lozano, creadoras de este gran Taller que invita a viajar al mejor de los sueños.

Ana Serrano, agradecía el trabajo de Laura y María cada año se superan convirtiendo la Ermitilla en un lugar de ensueño del que no apetece salir e invitaba a toda la ciudadanía y vecinos de la comarca a visitar este Taller que con tanta ilusión se prepara.  

Laura y María explicaban que toda la decoración está hecha a mano, por lo que lleva mucho trabajo, esfuerzo y dedicación.  En esta ocasión, se han sumado nuevos espacios a este Taller como la habitación de Papá Noel y el Polo Norte. En el Taller pueden verse objetos de gran valor, sobre todo sentimental.

El objetivo de este Taller es conseguir transportar a los niños a un lugar mágico y que puedan hacer volar su imaginación haciendo más deseada, aún si cabe, la llegada de Papá.

María y Laura destacaban también la iluminación que Puntero Sonido e Iluminación lleva a cabo porque permite crear el ambiente ideal para que todo aquél que pase se sienta como en el propio Taller de Papá Noel y disfrute mientras recorre la sala.